¿Sobran universitarios en España?

La verdad es que hasta la pregunta es molesta por obvia. Sin embargo, hay quien piensa que sí, que sobran universitarios simplemente porque no deben haber caído en la cuenta que no sobra gente con “educación superior” sino que el problema es que faltan empleos en los que estén ocupados y ése es el verdadero problema.

En España las expectativas laborales de los trabajadores de cualificación media-alta cada día pasa más por la opción de emigrar

Una educación universitaria hoy por hoy no garantiza, ni mucho menos, un “alto” nivel de vida. Y en algunos casos ni uno medio. Los salarios que reciben aquellas personas que tienen un elevado nivel educativo, en parte provienen de las privaciones (dedicación a estudiar en vez de a trabajos remunerados, etc.) durante el largo periodo de formación. Una vez finalizados los estudios, las proyecciones profesionales se encuentran con el “verdadero” mercado laboral donde las expectativas salariales no se cumplen. Al final tres soluciones: seguir formándose (cosa que no asegura un aumento de las retribuciones), conformarse “con lo que hay”, o emigrar.

El grave problema de la emigración de profesionales especializados en los países subdesarrollados

Entre todos los problemas que padecen los países económicamente subdesarrollados, el del la huída de cerebros, o mejor dicho, la emigración de aquellos profesionales de alta especialización académica es uno de los mayores. Actualmente se considera al capital humano como el factor de producción más importante, es decir, los conocimientos adquiridos (ya sean académicos, experiencia, etc.) son los principales valores de un país y los que conducen a éste a los niveles de desarrollo económico que por ejemplo se pueden encontrar en Europa.