A pesar de lo que se pueda creer a priori, el gasto porcentual respecto al PIB en I+D del Sector Público en España es con creces mucho mayor (como se puede observar en el primer gráfico) que el de las “grandes” economías europeas o que el del Estados Unidos (país puntero en I+D). Mientras el estancamiento en el resto de economías ha sido la tónica general en la última década, en España el crecimiento del gasto ha sido espectacular, llegando en muchos casos a doblar la inversión en I+D de países como Francia, Alemania, Reino Unido o Italia.
Cierto es que la investigación española necesitaba un gran empujón económico y que el diferencial de gasto con las principales economías mundiales era muy elevado, pero no cabe duda de que, en lo que al Sector Público se refiere, ese esfuerzo actualmente es evidente. Sin embargo en el caso de la empresas privadas, el gasto en I+D en mucho menor que el del resto de países. Es decir, el esfuerzo económico llevado a cabo por el Sector Público es muy importante mientras que el llevado a cabo por el sector privado es aún muy escaso (no alcanza el 60% del realizado por los principales países de la Unión Europea). Y hay que recordar que la “investigación y el desarrollo”, para que produzcan resultados notables para el crecimiento de un país, es tarea tanto para el Sector Público como para el privado.
¿Entonces por qué no se aprecian significativamente en la economía española los esfuerzos en el gasto de I+D? En España existe un problema de “comunicación” entre el Sector Público y el sector privado y es por ello que las innovaciones desarrolladas por el primero no se asimilan “bien” en el segundo sector. Se podría decir que se pierde su efectividad debido a la escasa capacidad de absorción de las innovaciones por parte de las empresas privadas. Las causas son múltiples pero entre ellas cabría destacar, comparativamente respecto a los países de nuestro entorno, el desarrollo del capital humano o la alta temporalidad del empleo en España.
En definitiva, no sólo es relevante el gasto total en I+D que se lleve a cabo en un país (suma del Sector público y privado) sino la capacidad de absorción de estas innovaciones por parte de las empresas. De poco vale desarrollar técnicas o tecnologías que luego no se es capaz de aplicar.
Fuente:
Banco de España.
Por antonomasia 
#1 por anónimo el octubre 13, 2010 - 4:41 pm
Sales muy chulo en la foto de tu perfil del blog XD
#2 por Kacko el octubre 13, 2010 - 5:59 pm
Te recomiendo que pases por tu artículo publicado en meneame. En los comentarios se explican algunos fallos en frases y encabezados de los gráficos que han sido entendidos como intentos de manipulación.
#3 por Bruno Rico el octubre 13, 2010 - 8:01 pm
Gracias por el post. Muy interesante.
Sería interesante también relacionarlo con las cifras del desempleo… ¿qué es lo que lleva a los empresarios a no innovar y a crear contratos precarios? ¿que es lo que nos corta para crear nuevas empresas y cambiar esta situación?
Supongo que no llega con aumentar el gasto, sino que también hay que conseguir que la gente se anime a innovar y emprender
Un saludo!
#4 por porantonomasia el octubre 14, 2010 - 12:17 am
#2 Kacko; en su día fui usuario activo de menéame y me di de baja. La opinión de los demás siempre se ha de tener en cuenta pero respecto a ciertos temas unas más que otras.