Durante meses los partidos políticos llevan hablando (planificando, recurriendo, acordando, estudiando, baremando, analizando, discutiendo, sopesando, comparando y un larguísimo etcétera) sobre la necesidad de llevar a cabo reformas económicas en España para acelerar la salida de la crisis ¿dónde están esas medidas? ¿Y dónde está el consenso entre partidos? A este paso parece más probable que la economía se recupere por si sóla que por los aportes de quienes han de regir sobre ella. Estamos cercanos a la mitad de 2010 y aun no hay reformas estructurales considerables, más allá de la palabrería de todos.
"Generación del desencanto"
Hay que actuar, no es suficiente hablar o hacer estimaciones si no se realizan los cambios necesarios para llegar a ello. Todos los entes económicos y políticos del país discuten entre ellos sin llegar a ningún acuerdo. Acuerdo éste al que se debería haber llegado hace un par de años, y aun hoy seguimos con las mismas.
La economía española está muy deteriorada y el diferencial que había recortado con el resto de economías potentes del mundo se acrecienta, con todo el esfuerzo que costó reducirlo ¿Qué enfermedad padece un país en el que nadie mira por el bien común sino por el propio?
Parece que tendremos que esperar a llegar a la situación de los griegos (cuando las barbas de tu vecino veas cortar…) porque no escarmentamos. Y tras el duro tirón de orejas de la Unión Europea, buscaremos siempre responsables fuera, cuando el problema está dentro. En España, los responsables siempre son los demás. Eso sí, los que acaban pagando el convite son los de siempre.
Reformas y consenso ¡ya y no dentro de «unos» meses!
Por antonomasia 
